Valle de Arratia no es una zona turística
extremadamente masificada en comparación con otras regiones turísticas más
populares en España. Sin embargo, cuenta con algunos lugares encantadores y
atractivos que atraen a los visitantes que buscan experiencias más auténticas y
menos concurridas.
El Parque Natural del Gorbea es visitado cada año por
miles de personas, porque sigue siendo un lugar mítico para los vizcaínos y
espectacular para los turistas que llegan a él. Aquí te proponemos que recorras
el Valle de Arratia antes de llegar a tu destino, así podrás descubrir parajes
maravillosos y otros secretos bien guardados por los arratianos.
Primera parada del Valle de Arratia: Bedia
Bedia se ubica en un entorno natural destacado, en el valle
del río Ibaizabal, con el monte Mandoya a sus pies. El río Ibaizabal atraviesa
el término municipal de oeste a este, recibiendo pequeños arroyos, entre los
que destaca el Lekubaso.
El municipio de Bedia cuenta con un valioso conjunto de
patrimonio, tanto histórico como cultural. El edificio más significativo es la
iglesia de San Juan Bautista, que destaca por sus tres altares y su nave con
bóvedas.
Entre los lugares destacados de Bedia se encuentran la ermita
de San Lorenzo, la escultura Elejalde y el palacio Bidekolea. Además, la
localidad acoge numerosos caseríos, molinos y casas palacios, lo que contribuye
a crear un ambiente acogedor y preservar la tradición del entorno rural vasco.
Segunda parada del Valle de Arratia: Lemoa
En este municipio de la comarca de Arratia, dos ríos atraviesan la región: el Ibaizabal y su afluente Arratia. El pueblo se encuentra protegido por la conocida Peña Lemoa, donde durante la pasada guerra civil, se libraron intensos combates que dejaron huellas de tragedia en sus laderas. (se pueden visitar los restos del cinturón de hierro)
El puente medieval de Lemoa es otro punto de interés
histórico en el pueblo. Es un puente de piedra que data de la Edad Media y
forma parte del patrimonio local.
Lemoa disfruta de un entorno privilegiado, ubicado en las
proximidades del parque natural de Gorbeia. Aquí, diversas rutas permiten
explorar los alrededores de la localidad y deleitarse con las inmejorables
vistas de la comarca de Arratia. La combinación de su patrimonio histórico y la
belleza natural hacen de Lemoa un lugar especial para visitar.
(Dónde comer en Lemoa, comida casera y rica)
Tercera parada del Valle de Arratia: Igorre
Igorre se encuentra en una ubicación excepcional, entre los
parques naturales de Urkiola y Gorbeia, lo que brinda numerosas oportunidades
para disfrutar de planes y rutas en los alrededores. Este hermoso valle está
lleno de leyendas y personajes mitológicos, y cuenta con zonas naturales de
gran interés que realzan su paisaje.
Sus alrededores están rodeados por los montes Mandola y
Aramotz, mientras que el río Arratia cruza el municipio y recoge las aguas del
regato Indusi. En el barrio Elexalde, se encuentra el núcleo principal de
Igorre, donde destaca la iglesia parroquial de Santa María, adornada con
impresionantes retablos de diversos estilos.
Además, Igorre cuenta con numerosas ermitas ubicadas en
diferentes barrios. Una de ellas es la medieval ermita de San Cristóbal de
Elgezua, de estilo románico tardío y forma rectangular. Situada en el barrio de
Santa Lucía, se encuentra en un entorno verde con caseríos dispersos y alberga
un retablo neogótico del siglo XVI en su interior.
Cuarta parada del Valle de Arratia: Arantzazu
Aranzatzu es un pequeño pueblo que pasa desapercibido a mano
derecha de la ruta, pero que alberga la Iglesia de San Pedro. Este edificio
neoclásico de tamaño reducido tiene una estructura cruciforme, pero su interior
ha cambiado drásticamente después de que se retirara la bóveda de yeso, dejando
a la vista la armadura de madera. Construida con caliza gris, la iglesia es
obra del académico Manuel Fermín de Vidaurre en 1826.
Quinta parada del Valle de Arratia: Dima
Esta encantadora localidad se encuentra estratégicamente
ubicada para acceder a dos de los parques naturales más destacados de Bizkaia:
el Parque Natural de Gorbeia y el de Urkiola. Estos parques ofrecen vistas
impresionantes que valen la pena disfrutar, y brindan numerosas oportunidades
para realizar actividades al aire libre entre los valles, bosques y montañas
que la rodean.
Dima cuenta con una rica colección de patrimonio histórico.
La iglesia parroquial de San Pedro Apóstol se encuentra en el corazón del
núcleo urbano. Además, la ermita-humilladero, el palacio Urizar, la
torre Ziarrusta y la iglesia gótica de Magdalena de Lamindao
complementan este valioso patrimonio.
Un atractivo enclave natural lo conforman las Cuevas de
Baltzola, uno de los lugares de escalada deportiva más importantes del
mundo. Cerca se encuentra el puente de Jentilzubi, una impresionante
formación rocosa que se apoya sobre dos montes, creando una cuenca.
Sexta parada del Valle de Arratia: Artea
En el corazón del pintoresco valle de Arratia, se encuentra
Artea, un encantador pueblo rodeado por la majestuosidad del Parque Natural de
Gorbeia y cercano a otros municipios como Arantzazu, Areatza, Dima, Zeanuri,
Zeberio y Orozko. Esta ubicación privilegiada le regala vistas espectaculares y
un entorno natural envidiable.
Artea es una pequeña localidad que se enorgullece de contar
con el primer Ecomuseo del Caserío Vasco, una iniciativa que se inició
en 1997 con el objetivo de preservar y difundir las tradiciones y modos de vida
del entorno rural vasco. También cerca, en el edificio Meñaka, se encuentra el
interesante Museo del Archivo Histórico del Nacionalismo, un recorrido
fascinante por la historia de Euskadi durante el último siglo.
Después de explorar los museos, merece la pena detenerse en
la hermosa iglesia de San Miguel y la encantadora ermita de San Martín. Además,
los amantes de la arquitectura histórica pueden descubrir los fascinantes restos
de las antiguas torres de Torrea, Ugarte y Galindo.
El río Arratia y el Laureta fluyen por el centro del pueblo,
creados por las aguas que descienden de las estribaciones del Gorbeia. Estos
cursos de agua dan lugar a escenarios naturales hermosos que invitan a recorrer
diferentes senderos y paseos por la zona.
En cuanto a sus festividades, Artea celebra con entusiasmo
las fiestas patronales de Andra Mari el 8 de septiembre. Además, durante esas
fechas, se celebra Merkartea, una emocionante feria agrícola y artesana
que atrae a numerosos visitantes cada año.
Octava parada del Valle de Arratia: Areatza (Villaro)
En el hermoso valle de Arratia, se encuentra esta
encantadora villa medieval, abrazada por la majestuosa montaña Gorbeia, la más
alta de Bizkaia. Su casco urbano ha sido declarado Bien Cultural con la
categoría de Conjunto Monumental, lo que lo convierte en un lugar de gran
interés arquitectónico.
Las características del casco antiguo invitan a dar un paseo
por sus estrechas y empedradas calles, donde se pueden admirar las singulares
casas que conservan el auténtico sabor vasco. El municipio alberga un patrimonio
arquitectónico único que vale la pena descubrir.
En la margen derecha del río Arratia, frente al puente de
Zubizarra, se encuentra el convento de Santa Isabel. También se puede visitar
la discreta iglesia de San Bartolomé, una construcción finalizada en el siglo
XIX. Luego, los edificios más destacados se agrupan en la plaza del
ayuntamiento, como el palacio Gortazar, el palacio Riscal y el propio
consistorio de estilo neoclásico.
Areatza, situado en un impresionante paraje a los pies de
Gorbeia, es un punto de partida ideal para numerosas excursiones de montaña. El
Parque Natural de Gorbeia es considerado como una de las zonas más bellas de la
Comunidad Autónoma Vasca debido a su incalculable valor paisajístico, cultural
y natural.
En Areatza, se pueden ver los siguientes puntos de interés:
- Torre
de Ugunaga (s. XVI)
- Casa
de Gorordo (1675)
- Casa
Mudéjar (1525)
- Casa
Gótica (1490)
- Casas
barrocas (s. XVII)
- Convento
de Santa Isabel (1643)
- Palacio
Gortázar o del Riscal (s. XV)
- Ayuntamiento
(1862)
- Iglesia
parroquial de San Bartolomé (s. XIV)
- Fuente
del Aska o de la alcachofa (S. XIX)
Estos son los lugares notables para visitar en Areatza, que
ofrecen una mezcla fascinante de arquitectura y patrimonio histórico que abarca
varios siglos. (más info)
Novena parada del Valle de Arratia: Zeanuri (llegaste a las faldas del Gorbeia)
Situada en las faldas del legendario monte Gorbea (1.481 m),
Zeanuri es una pequeña localidad del valle de Arratia que se compone de varios
barrios dispersos con un marcado carácter rural. Su principal atractivo radica
en el excepcional entorno natural del Parque Natural de Gorbeia, que
abarca parte de sus tierras, junto con el valioso legado histórico que atesora
la villa.
Zeanuri cuenta con una gran cantidad de caseríos en su
núcleo urbano, representativos de la arquitectura popular vasca, lo que refleja
su rica herencia histórico-arquitectónica.
La visita comienza en la hermosa iglesia de Andra Mari,
construida a mediados del siglo XVIII, que cuenta con tres naves, cinco
altares, coro y torre. Además, hay otras iglesias y numerosas ermitas
repartidas por los diversos barrios que también merecen una visita. Edificios
singulares como la torre Akauri, el palacio Axpe e incluso el propio
Ayuntamiento también son de interés.
Otros lugares destacados incluyen el molino de Olabarri,
que ha sido restaurado para mostrar el antiguo oficio de los molineros, y el
calero de San Justo, ubicado cerca de la ermita de San Justo en medio de un
robledal. El horno, aunque inactivo, se mantiene en perfecto estado y se pone
en funcionamiento durante el primer fin de semana de agosto.
El Parque Natural de Gorbeia, donde se encuentra Zeanuri,
ofrece una rica experiencia natural. Con su privilegiada ubicación, el
municipio es un punto de partida ideal para diversas rutas de montaña. El
parque destaca por su impresionante paisaje y rica fauna, con el ciervo como
especie emblemática, y sus cimas, incluida la famosa montaña Gorbea, que es un
hito para los amantes del montañismo vasco.
Además, Zeanuri alberga lugares encantadores como el humedal
de Saldropo, donde se encuentra un centro de interpretación y un área
recreativa bien equipada, accesible desde el Alto de Barazar.
NOTA DE LA AUTORA: estos artículos se escriben con la ilusión de compartir conocimiento. Ahora bien, ni soy una magnifica escritora, ni tengo todos los conocimientos del mundo. Por esto, recopilo y transformo la información que encuentro (que a veces puede que no sea exacta) y me gustaría que si encuentras una errata o algo que no sea correcto, por favor me lo hagas saber mediante un comentario dejado aquí. La idea es que entre todas las personas, no dejemos olvidar la historia y las maravillas de la tierra que nos ha visto crecer, o en mi caso, que me acoge tan gratamente.
Si tienes alguna foto antigua del algún espacio que quieras compartir y aunar en la historia colectiva, estaré encantada de publicarla. Pero que sepas, que una vez publicada, puede ser "robada" por otras personas. Es bueno que esto quede claro, aunque yo creo que el compartir es mucho más importante que enterrar. En la mayoría de las ocasiones, las fotos familiares quedan olvidadas en un cajón y acaban donde ya nadie puede, o quiere verlas... no las dejes allí, compártelas (mi mail: monica.carratala@gmail.com) para que nos ayuden a conquistar la historia. ESKERRIK ASKO!
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